La situación en Gaza se ha vuelto cada vez más crítica, especialmente tras las recientes declaraciones de Israel en el Consejo de Seguridad de la ONU. En una reunión celebrada el 23 de julio de 2025, el embajador israelí, Danny Danon, anunció que su país limitará a solo un mes los visados para los empleados de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA). Esta decisión se produce en un contexto de creciente preocupación por la crisis humanitaria en la región, donde miles de personas enfrentan la inanición y la falta de atención médica adecuada.
Israel ha acusado a la OCHA de tener un sesgo contra el Estado israelí, alegando que varios de sus empleados están afiliados a Hamás, el grupo militante que controla Gaza. Danon afirmó que algunos de estos trabajadores incluso habrían participado en los ataques terroristas del 7 de octubre de 2023, que resultaron en la muerte de casi 2,000 personas. Sin embargo, el embajador no presentó pruebas concretas que respaldaran estas acusaciones, lo que ha generado un debate sobre la veracidad de sus afirmaciones y la motivación detrás de esta medida.
### La Emergencia Humanitaria en Gaza
La crisis humanitaria en Gaza ha alcanzado niveles alarmantes. Con un número creciente de muertes por inanición y la falta de acceso a servicios básicos, la situación se ha vuelto insostenible. En medio de este contexto, el Papa ha instado a la comunidad internacional a permitir la entrada de ayuda humanitaria en la región, subrayando la necesidad urgente de asistencia para los palestinos que sufren las consecuencias de este conflicto prolongado.
El anuncio de Israel de restringir los visados a los empleados de la OCHA ha sido interpretado como un intento de deslegitimar a las agencias de la ONU que trabajan en la región. Danon utilizó su intervención en el Consejo de Seguridad para criticar a la ONU en su conjunto, afirmando que la organización ha abandonado su neutralidad y se ha alineado con una agenda política que perjudica a Israel. Esta postura ha generado preocupación entre los defensores de los derechos humanos, quienes advierten que limitar el acceso de la ayuda humanitaria solo exacerbará la crisis en Gaza.
La OCHA ha sido un actor clave en la coordinación de la ayuda humanitaria en los territorios palestinos, y su capacidad para operar de manera efectiva se ve amenazada por estas nuevas restricciones. La decisión de Israel de no renovar automáticamente los visados para el personal internacional de la OCHA podría tener repercusiones devastadoras para la población de Gaza, que ya enfrenta una grave escasez de alimentos y medicinas.
### La Reacción Internacional y las Acusaciones de Sesgo
Las acusaciones de Israel hacia la OCHA no son nuevas. En el pasado, el país ha lanzado ataques similares contra la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), acusándola de complicidad con Hamás. Estas acusaciones han llevado a una campaña de descrédito que ha afectado la financiación y las operaciones de la UNRWA, lo que ha resultado en una crisis humanitaria aún más profunda para los refugiados palestinos.
La comunidad internacional ha reaccionado con preocupación ante las declaraciones de Israel. Estados Unidos, un aliado cercano de Israel, ha sido criticado por su postura en relación con la ayuda humanitaria en Gaza. Algunos funcionarios han calificado de «hipócrita» a la ONU por su papel en la entrega de asistencia a la región, lo que ha generado un debate sobre la efectividad de las políticas internacionales en la resolución de la crisis.
El jefe de la OCHA en los territorios palestinos, Jonathan Whittall, ha expresado su frustración ante lo que considera una «campaña interminable de difamación» contra su organización. Su situación es emblemática de la creciente tensión entre Israel y las agencias de la ONU, que se encuentran en una encrucijada en medio de una crisis humanitaria sin precedentes.
La comunidad internacional se enfrenta a un dilema: cómo abordar la crisis en Gaza sin comprometer la seguridad de los trabajadores humanitarios y la efectividad de la ayuda. Las restricciones impuestas por Israel a los visados de la OCHA podrían tener consecuencias devastadoras para la población de Gaza, que ya se encuentra en una situación crítica. A medida que la crisis se intensifica, la presión sobre la comunidad internacional para encontrar soluciones efectivas y sostenibles se vuelve cada vez más urgente.