La reciente elección de Tatiana Coronel como nueva vicealcaldesa de Guayaquil ha marcado un hito en la política local, rompiendo con una tradición de continuidad que había prevalecido durante más de tres décadas. Este cambio se produce en un contexto político complejo, donde el alcalde Aquiles Alvarez enfrenta desafíos legales y la necesidad de mantener la cohesión entre los movimientos políticos que lo respaldan.
La elección de Coronel, del movimiento Renovación Total (RETO), se llevó a cabo el 15 de mayo de 2025, en una sesión del Concejo Cantonal. Este evento no solo representa un cambio en la administración local, sino que también refleja las dinámicas de poder en la ciudad. Alvarez, quien fue elegido con el apoyo de la Revolución Ciudadana (RC), ha enfatizado que la decisión de elegir a Coronel fue un simple resultado de la mayoría en el Concejo, desestimando rumores de fracturas políticas entre los dos movimientos aliados.
### Un Cambio Significativo en la Vicealcaldía
Tatiana Coronel asume el cargo en un momento crucial para la ciudad y para el propio alcalde. La vicealcaldía, que tradicionalmente ha sido un puesto de continuidad, ahora se enfrenta a un nuevo escenario. En los últimos 15 años, el Código Orgánico de Organización Territorial (Cootad) ha permitido que los vicealcaldes sean elegidos cada dos años entre los concejales, pero todos los que han ocupado el cargo han completado al menos cuatro años de mandato. La elección de Coronel, por lo tanto, no solo es un cambio de figura, sino que también podría tener implicaciones significativas en la gobernabilidad de Guayaquil.
El alcalde Alvarez ha expresado su apoyo a Coronel, destacando su compromiso con la ciudad y su capacidad para asumir el cargo. Sin embargo, la elección también ha suscitado críticas y cuestionamientos sobre la legitimidad del proceso. La concejala Cinthia García, del Partido Social Cristiano (PSC), se abstuvo de votar, argumentando que la elección de Coronel era un reflejo de un conflicto interno en el movimiento del alcalde. Esta abstención ha puesto de manifiesto las tensiones que existen dentro del Concejo y entre los diferentes partidos políticos.
### Desafíos Legales y Políticos para Aquiles Alvarez
La elección de Coronel se produce en un contexto donde el alcalde Aquiles Alvarez enfrenta una causa judicial relacionada con la presunta comercialización ilegal de combustibles, conocida como el caso Triple A. Este escándalo ha generado incertidumbre sobre su futuro político y ha puesto en tela de juicio su capacidad para gobernar. En caso de que Alvarez se vea obligado a ausentarse, ya sea temporal o permanentemente, la nueva vicealcaldesa asumiría automáticamente la administración de la alcaldía, lo que añade una capa adicional de complejidad a la situación.
Durante la sesión de elección, Alvarez se vio obligado a matizar sus posturas respecto a su relación con la Revolución Ciudadana y el expresidente Rafael Correa. A pesar de su cercanía con Correa, el alcalde ha insistido en que no es un “títere” de nadie, reafirmando su independencia política. Esta declaración es crucial, ya que la percepción de que Alvarez podría estar bajo la influencia de Correa podría afectar su legitimidad y su capacidad para gobernar de manera efectiva.
La elección de Coronel también ha sido interpretada como un intento de Alvarez por consolidar su poder y asegurar una mayor estabilidad en su administración. Sin embargo, las tensiones internas y las críticas de otros partidos sugieren que el camino hacia la gobernabilidad no será fácil. La concejala Ana Chóez, del PSC, votó en contra de la designación de Coronel, argumentando que la moción obedecía a pactos coyunturales y no a un verdadero interés por el bienestar de la ciudadanía.
En este contexto, la figura de Tatiana Coronel se convierte en un elemento clave para el futuro político de Guayaquil. Su capacidad para navegar en un entorno político tan complejo y su habilidad para trabajar en conjunto con el alcalde y otros concejales serán determinantes para el éxito de su gestión. La nueva vicealcaldesa tendrá que demostrar que puede ser un puente entre las diferentes facciones políticas y que puede contribuir a la estabilidad y el desarrollo de la ciudad.
La elección de Tatiana Coronel no solo representa un cambio en la administración local, sino que también refleja las dinámicas de poder en Guayaquil y los desafíos que enfrenta el alcalde Aquiles Alvarez. A medida que se desarrollan los acontecimientos, será crucial observar cómo se desarrollan las relaciones entre los diferentes actores políticos y cómo esto impacta en la gobernabilidad de la ciudad.
