En Guayaquil, la situación de la salud pública se ha convertido en un tema de preocupación constante. La falta de insumos, medicamentos y atención adecuada en los hospitales ha llevado a que ciudadanos como Herlinda Osorio y Xiomara Jara se conviertan en voces de protesta y defensa de los derechos de los pacientes. Estas mujeres, integrantes del Comité de Usuarios de Servicios de Salud, han dedicado su tiempo y esfuerzo a mejorar las condiciones de atención en hospitales como el Abel Gilbert Pontón, conocido como Monte Sinaí.
La realidad que enfrentan los pacientes en estos hospitales es alarmante. Herlinda, de 63 años, ha sido testigo de la crisis que afecta a los hospitales del Ministerio de Salud Pública (MSP). «En el hospital Monte Sinaí no tienen ni para esterilizar los materiales en los quirófanos», denuncia. Su compromiso con la comunidad la ha llevado a recorrer los pasillos del hospital, encuestando a los pacientes sobre su atención y recopilando quejas que luego presenta a las autoridades competentes. «No trabajamos para el gobierno, hacemos una labor social, sin fines de lucro», afirma con determinación.
La falta de insumos y medicamentos es solo una parte del problema. La atención al paciente también deja mucho que desear. Herlinda relata casos desgarradores, como el de su nieta, quien no fue admitida en el hospital a tiempo y falleció en brazos de su madre. «Los médicos son aves de paso aquí, juegan con la vida de las personas», expresa con tristeza. La falta de empatía y la mala atención son constantes en su relato, lo que refleja una crisis profunda en el sistema de salud pública.
### La Resiliencia de los Comités de Usuarios
Los Comités de Usuarios de Servicios de Salud, como el que integra Herlinda, tienen un papel fundamental en la vigilancia y control de la atención médica. Según la Ley de Participación Ciudadana, estos comités son organizaciones cívicas que actúan como intermediarios entre los usuarios y los prestadores de servicios. Su misión es garantizar que se brinde una atención digna y de calidad a los pacientes.
Xiomara Jara, otra de las integrantes del comité, comparte su experiencia. Desde 2009, ha estado luchando por los derechos de los ciudadanos en Monte Sinaí. «Mi objetivo es ver a los grupos prioritarios, como personas mayores y adolescentes embarazadas, recibir la atención que merecen», dice. Su compromiso la ha llevado a capacitarse y aprender sobre leyes y derechos, convirtiéndose en una voz respetada en su comunidad.
Ambas mujeres enfrentan retos significativos en su labor. La resistencia de algunos médicos y autoridades es palpable. «Siempre he discutido. Los médicos se molestan cuando les pido que atiendan bien a los pacientes», cuenta Xiomara. Sin embargo, su determinación no flaquea. «Los usuarios son mi familia. Si no me atienden bien, yo me encargo de que lo hagan», añade con firmeza.
La situación en los hospitales es crítica. La falta de limpieza, insumos y medicamentos es una constante. Herlinda y Xiomara han sido testigos de negligencias que han costado vidas. «Una señora que iba a dar a luz fue regresada porque no tenía el dinero para comprar los insumos necesarios. El niño se le murió», relata Xiomara, evidenciando la dura realidad que enfrentan los pacientes.
### La Necesidad de un Cambio Estructural
La crisis en el sistema de salud pública en Guayaquil no es un problema aislado. Es un reflejo de una falta de inversión y atención a las necesidades de la población. La voz de los comités de usuarios es crucial para visibilizar esta problemática y exigir cambios. La participación ciudadana es un derecho que debe ser respetado y promovido, y estos comités son un ejemplo de cómo la comunidad puede organizarse para luchar por sus derechos.
Herlinda y Xiomara, a pesar de las adversidades, continúan su labor con la esperanza de que algún día la atención en los hospitales mejore. «No tengo sueldo, pero tengo la satisfacción de ayudar a los demás», dice Herlinda. Su compromiso y dedicación son un faro de esperanza en medio de la crisis sanitaria que enfrenta Guayaquil.
La historia de estas mujeres es un llamado a la acción. Es fundamental que las autoridades escuchen las demandas de los ciudadanos y trabajen en conjunto para mejorar el sistema de salud. La salud es un derecho humano y debe ser garantizado para todos, sin excepción. La lucha de los Comités de Usuarios de Servicios de Salud es un ejemplo de cómo la comunidad puede unirse para exigir un cambio y garantizar una atención digna para todos los pacientes en Guayaquil.