La política peruana ha estado marcada por la inestabilidad en los últimos años, y la reciente destitución de Dina Boluarte ha añadido un nuevo capítulo a esta historia. La Fiscalía de Perú ha solicitado al Poder Judicial que impida la salida del país de la ex presidenta por un periodo de hasta 36 meses, en medio de múltiples investigaciones por presuntos delitos de corrupción y violaciones a los derechos humanos. Este artículo explora las implicaciones de esta solicitud y el contexto político que rodea a Boluarte.
### Contexto Político y la Destitución de Boluarte
Dina Boluarte asumió la presidencia de Perú a finales de 2022, sucediendo a Pedro Castillo, quien fue destituido tras un intento fallido de disolver el Congreso. Desde su llegada al poder, Boluarte enfrentó una serie de desafíos, incluyendo protestas masivas y una creciente oposición política. Su gobierno fue sostenido por partidos de derecha que, a pesar de las tensiones, lograron mantenerla en el cargo durante casi tres años.
Sin embargo, la situación se tornó insostenible, y el 10 de octubre de 2025, Boluarte fue destituida por el Congreso, lo que provocó una ola de reacciones tanto a nivel nacional como internacional. La destitución fue vista por muchos como un reflejo de la polarización política en el país, donde las luchas de poder entre diferentes facciones han llevado a una crisis de gobernabilidad.
La solicitud de la Fiscalía para prohibir la salida de Boluarte del país se basa en al menos once investigaciones abiertas en su contra. Entre los delitos que se le imputan se encuentran la negociación incompatible y el lavado de activos, lo que ha generado un clima de incertidumbre sobre su futuro político y judicial. La medida de prohibición de salida se ha solicitado por un plazo de 18 meses en relación con las acusaciones de negociación incompatible, y por 36 meses en el caso del lavado de activos.
### Implicaciones de la Solicitud de Prohibición de Salida
La solicitud de la Fiscalía tiene varias implicaciones significativas. En primer lugar, refleja la gravedad de las acusaciones en contra de Boluarte y la determinación del Ministerio Público de investigar a fondo los posibles delitos cometidos durante su mandato. Esto podría sentar un precedente en la lucha contra la corrupción en Perú, un país que ha lidiado con escándalos políticos y corrupción en los más altos niveles de gobierno durante décadas.
Además, la prohibición de salida del país podría complicar aún más la situación de Boluarte, quien ya se encuentra en una posición vulnerable tras su destitución. Si se le prohíbe salir, esto podría limitar sus opciones para buscar asilo político en el extranjero, una posibilidad que ha sido discutida en círculos políticos. La ex presidenta ha sido objeto de críticas tanto por su gestión como por las decisiones que tomó durante su tiempo en el cargo, lo que ha llevado a muchos a cuestionar su futuro en la política peruana.
Por otro lado, la situación de Boluarte también pone de relieve la tensión entre el poder judicial y el poder político en Perú. La intervención del Ministerio Público en este caso podría ser vista como un intento de fortalecer la independencia judicial en un contexto donde la corrupción ha socavado la confianza en las instituciones. Sin embargo, también existe el riesgo de que esta acción sea percibida como un uso político de la justicia, lo que podría exacerbar aún más la polarización en el país.
La situación de Dina Boluarte es un reflejo de los desafíos que enfrenta Perú en su camino hacia la estabilidad política. La lucha contra la corrupción y la defensa de los derechos humanos son temas que han cobrado relevancia en el discurso político, y el caso de Boluarte podría convertirse en un símbolo de la necesidad de reformas profundas en el sistema político peruano.
En resumen, la solicitud de prohibición de salida del país para Dina Boluarte no solo tiene implicaciones legales, sino que también refleja la complejidad del panorama político en Perú. A medida que el país navega por estas aguas turbulentas, el futuro de Boluarte y la respuesta de las instituciones peruanas a la corrupción seguirán siendo temas de gran interés y relevancia.