En un giro inesperado en la política ecuatoriana, el presidente de la Asamblea, Niels Olsen, ha anunciado la apertura de una investigación a la asambleísta de Revolución Ciudadana, Nuria Butiña, tras recibir denuncias sobre un supuesto cobro de diezmos. Esta situación ha generado un gran revuelo en el ámbito político y social del país, ya que las acusaciones de corrupción en la Asamblea Nacional son un tema delicado y recurrente.
La denuncia fue presentada por un exasesor de Butiña, identificado como Iván Castro Velastegui, quien alega haber sido víctima de extorsión laboral. Según su relato, se le solicitó entregar una parte de su sueldo, alterar declaraciones juramentadas y soportar un hostigamiento constante. La denuncia fue formalizada el 19 de agosto de 2025, y el proceso ha comenzado a tomar forma en la gestión documental de la Asamblea.
### Proceso de Investigación y Reacciones Políticas
La denuncia ha sido ingresada oficialmente el 21 de agosto y, según el procedimiento establecido, el expediente será remitido a la Unidad Técnica Legislativa (UTL) para su revisión. Posteriormente, será conocido por el Consejo de Administración Legislativa (CAL), que tiene la responsabilidad de calificar la denuncia antes de enviarla al Comité de Ética de la Asamblea. Este proceso es crucial, ya que el Comité de Ética es el encargado de evaluar la conducta de los asambleístas y tomar decisiones sobre posibles sanciones.
Niels Olsen, en su rol como presidente de la Asamblea, ha manifestado su compromiso de abordar la situación con seriedad. En sus declaraciones, enfatizó que «aquí no hay lugar para los vivos ni ‘majaderos’ que se aprovechan de su cargo y abusan de sus trabajadores». Esta postura ha sido bien recibida por algunos sectores de la población, que ven en la investigación una oportunidad para limpiar la imagen de la Asamblea Nacional, que ha sido objeto de críticas por casos de corrupción en el pasado.
La asambleísta Butiña, por su parte, no ha emitido comentarios sobre las acusaciones hasta el momento. Sin embargo, su bancada, Revolución Ciudadana, se encuentra en una situación delicada, ya que la corrupción es un tema que puede afectar su imagen y credibilidad ante los electores. La falta de pronunciamiento por parte de Butiña y su partido podría interpretarse como una estrategia para evitar más controversias mientras se desarrolla la investigación.
### Contexto de Corrupción en la Asamblea Nacional
La corrupción en la política ecuatoriana no es un fenómeno nuevo. A lo largo de los años, han surgido múltiples escándalos que han involucrado a funcionarios públicos y asambleístas. Estos casos han generado desconfianza en la ciudadanía hacia sus representantes y han llevado a un llamado generalizado por una mayor transparencia y rendición de cuentas.
El caso de Nuria Butiña se suma a una lista de denuncias que han sacudido a la Asamblea Nacional en los últimos años. La percepción de que algunos asambleístas utilizan su posición para beneficiarse personalmente ha llevado a un creciente descontento entre la población. En este contexto, la respuesta de Niels Olsen y la apertura de una investigación son vistas como pasos necesarios para restaurar la confianza en la institución.
Además, la pugna entre diferentes bloques políticos, como el correísmo y Acción Democrática Nacional (ADN), añade una capa de complejidad a la situación. La competencia por el control de la Asamblea y la implementación de reformas legales que podrían afectar a la Corte Constitucional son temas que han generado tensiones entre estos grupos. La investigación a Butiña podría ser utilizada por algunos sectores como una herramienta política para debilitar a la oposición, mientras que otros podrían verla como una oportunidad para limpiar la imagen de la Asamblea.
La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de la política en Ecuador. La capacidad de la Asamblea para manejar este tipo de denuncias y la voluntad de sus miembros para actuar con integridad serán factores determinantes en la percepción pública de la institución. La presión social por una mayor transparencia y la lucha contra la corrupción son demandas que continúan resonando en la sociedad ecuatoriana, y el desenlace de esta investigación podría tener un impacto significativo en el panorama político del país.