La economía ecuatoriana enfrenta un desafío significativo debido al contrabando de diésel, un delito que ha generado pérdidas anuales estimadas en 120 millones de dólares. La reciente eliminación del subsidio estatal a este combustible, implementada el 13 de septiembre de 2025, busca no solo ajustar los precios, sino también combatir esta actividad ilícita que afecta gravemente las finanzas del país.
La ministra de Finanzas, Sariha Moya, ha señalado que la fuga de diésel subsidiado se debe a una tubería rota, lo que ha permitido que este combustible llegue a manos de organizaciones criminales. Este problema no es nuevo, ya que se han identificado discrepancias significativas entre los despachos de diésel y la facturación correspondiente. Según datos del Servicio de Rentas Internas (SRI), aproximadamente el 10% de los despachos de diésel, que equivale a 108 millones de galones, no se refleja en la facturación, lo que representa una pérdida considerable para el Estado.
### La Relación entre el Subsidio y el Contrabando
La eliminación del subsidio al diésel ha sido una medida controvertida, pero necesaria según el gobierno de Daniel Noboa. Antes de esta decisión, el precio del galón de diésel era de 1,80 dólares, y tras la eliminación del subsidio, se ha establecido un nuevo precio de 2,80 dólares, que se ajustará mensualmente a partir del 11 de diciembre de 2025. Esta medida busca redistribuir los recursos que anteriormente beneficiaban a quienes no necesitaban el subsidio, y que, en muchos casos, financiaban redes del crimen organizado.
El contrabando de diésel no solo afecta la economía nacional, sino que también tiene repercusiones en la seguridad pública. Las organizaciones criminales, como Los Tiguerones, Los Lobos, Los Choneros y Los Gánsters, han sido identificadas como las principales responsables del desvío de diésel hacia actividades ilegales, incluyendo la minería. En lo que va del año 2025, más de un millón de galones de combustibles han sido decomisados, de los cuales 686.778 galones corresponden a diésel. Este tipo de actividad delictiva se ha concentrado en tramos específicos de los poliductos, lo que ha llevado a las autoridades a intensificar los operativos de control.
### Consumo de Diésel en Ecuador: Un Análisis por Regiones
Un aspecto interesante del consumo de diésel en Ecuador es la variabilidad en las cifras según las regiones. Por ejemplo, las Islas Galápagos, que cuentan con menos de 1.000 vehículos a diésel, reportan un consumo promedio de 141 galones por carro al mes, lo que es sorprendentemente alto en comparación con provincias fronterizas como Carchi, donde el consumo es de 124 galones por vehículo. En contraste, en Zamora Chinchipe, una provincia amazónica con una alta incidencia de minería ilegal, el consumo promedio es de 741 galones al mes por vehículo, casi cuatro veces más que el promedio nacional.
Este patrón de consumo resalta la necesidad de un análisis más profundo sobre cómo se distribuye el diésel en el país y cómo se puede regular para evitar que caiga en manos equivocadas. La relación entre el subsidio y el consumo de diésel también plantea preguntas sobre la efectividad de las políticas actuales y la necesidad de implementar medidas más estrictas para controlar el uso de este combustible.
El gobierno ha propuesto 18 medidas de compensación para mitigar el impacto de la eliminación del subsidio en los sectores más vulnerables, incluyendo transportistas y agricultores. Estas medidas son cruciales para asegurar que la transición hacia un sistema de precios más justo no afecte desproporcionadamente a aquellos que dependen del diésel para su sustento diario.
La situación del contrabando de diésel en Ecuador es un reflejo de problemas más amplios en la economía y la seguridad del país. La lucha contra este delito requiere un enfoque integral que no solo aborde la eliminación del subsidio, sino que también implemente estrategias efectivas para desmantelar las redes criminales que se benefician de esta actividad ilícita. La colaboración entre diferentes entidades gubernamentales y la participación activa de la ciudadanía son esenciales para lograr un cambio significativo en esta problemática que afecta a todos los ecuatorianos.