La reciente decisión del Gobierno de Ecuador de eliminar el subsidio al diésel ha generado un gran revuelo en el sector del transporte. A partir del 13 de septiembre de 2025, el precio del diésel se incrementó de USD 1,80 a USD 2,80, lo que ha llevado a los transportistas a expresar su descontento y a organizar protestas. En respuesta, el Ministerio de Transporte ha implementado un sistema de compensaciones económicas para mitigar el impacto de esta medida en los transportistas.
**Compensaciones Económicas para Transportistas**
El Gobierno ha anunciado que se destinarán aproximadamente USD 68,7 millones hasta diciembre de 2025 para compensar a los transportistas afectados por el fin del subsidio. El ministro de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, ha indicado que ya hay transportistas registrados para recibir estas compensaciones, que se comenzarán a pagar a partir del lunes 15 de septiembre. Los propietarios de vehículos de transporte intercantonal, intraprovincial e interprovincial deberán registrarse en el portal oficial del Ministerio de Transporte para acceder a estos incentivos.
Las compensaciones se estructuran de la siguiente manera:
– Transporte intercantonal (urbano, rural y combinado): transferencia monetaria entre USD 400 y 700 mensuales.
– Transporte interprovincial: transferencia monetaria de USD 1.000 mensuales por unidad.
– Transporte intraprovincial: transferencia monetaria de USD 600 mensuales.
El registro para recibir estas compensaciones es permanente, y se realizarán cortes semanales para procesar los pagos. Esto significa que los transportistas que no logren registrarse antes del 14 de septiembre aún tendrán oportunidades futuras para hacerlo y recibir sus pagos en semanas posteriores.
**Protestas y Reacciones del Gremio de Transportistas**
A pesar de las medidas anunciadas por el Gobierno, el gremio de transportistas ha manifestado su rechazo a la eliminación del subsidio. La Federación Nacional de Cooperativas de Transporte Público de Pasajeros del Ecuador (Fenacotip) ha declarado que esta decisión afecta gravemente la operación del sector, y ha convocado a una asamblea general para discutir posibles acciones en respuesta a la medida. Los transportistas de Pichincha han decidido paralizar sus actividades a partir de la medianoche del 15 de septiembre, argumentando que la eliminación del subsidio fue una decisión inconsulta que impactará negativamente en su economía.
El gremio ha instado a sus afiliados a no registrarse en el sistema de compensaciones hasta que se tome una decisión formal en la asamblea general. Esta situación ha generado un ambiente de incertidumbre y tensión entre los transportistas, quienes consideran que el incremento en el precio del diésel podría llevar a un aumento en las tarifas de transporte, afectando a los usuarios finales.
El Gobierno, por su parte, ha defendido la eliminación del subsidio como una medida necesaria para mejorar la recaudación fiscal y garantizar una distribución más equitativa de los recursos públicos. Según el Ministerio de Transporte, el sistema de compensaciones se ha diseñado con base en un análisis técnico del consumo de combustible en los diferentes tipos de transporte, buscando asegurar que los recursos lleguen de manera justa a quienes realmente los necesitan.
**Impacto en la Economía y el Transporte Público**
La eliminación del subsidio al diésel no solo afecta a los transportistas, sino que también tiene implicaciones más amplias para la economía ecuatoriana. Los analistas han expresado opiniones divididas sobre esta medida. Algunos la consideran una decisión valiente y necesaria para la sostenibilidad fiscal del país, mientras que otros advierten que podría tener efectos adversos en la economía, especialmente en un contexto donde muchos sectores ya enfrentan dificultades económicas.
El aumento en el costo del combustible podría traducirse en un incremento en los precios de bienes y servicios, lo que afectaría a los consumidores. Además, la paralización de actividades por parte de los transportistas podría generar desabastecimiento en algunas áreas, complicando aún más la situación económica del país.
En este contexto, el Gobierno ha enfatizado la importancia de que los transportistas se registren para recibir las compensaciones, asegurando que estas medidas son parte de un esfuerzo más amplio para estabilizar la economía y garantizar un transporte público eficiente y accesible. Sin embargo, la resistencia del gremio y las protestas anunciadas sugieren que el camino hacia la implementación de estas políticas será complicado y requerirá un diálogo constante entre el Gobierno y los actores del sector transporte.