En el contexto económico actual de Ecuador, las tasas de interés han experimentado cambios significativos que afectan tanto a los ahorradores como a las instituciones financieras. Desde el segundo semestre de 2022 hasta mediados de 2024, el panorama para los ahorristas fue inusual, con un aumento notable en las tasas ofrecidas por los bancos privados. Sin embargo, en 2025, la situación ha cambiado drásticamente, lo que plantea nuevas preguntas sobre dónde es más rentable invertir el dinero.
**Evolución de las Tasas de Interés en el Sector Bancario**
Entre 2022 y 2024, los bancos privados en Ecuador comenzaron a ofrecer tasas de interés más altas para atraer a los ahorradores. Este cambio se debió a la necesidad de captar más depósitos en un entorno donde obtener recursos del exterior se volvió complicado y costoso. Las tasas promedio ofrecidas por la banca privada aumentaron de 5,2% anual en agosto de 2022 a un impresionante 8,5% en junio de 2024, marcando un pico histórico desde la dolarización del país. Sin embargo, a medida que la economía comenzó a recuperarse y la liquidez de los bancos mejoró, las tasas de interés comenzaron a descender nuevamente. En julio de 2025, la tasa promedio para los ahorradores en depósitos a plazo se situó en 5,24% anual, lo que representa una caída de 3,06 puntos en comparación con el mismo mes del año anterior.
Este descenso en las tasas de interés se debe a la mejora en las condiciones económicas, así como a la disminución del riesgo país, lo que ha permitido a los bancos adoptar una estrategia menos agresiva en la captación de ahorros. Con una mayor liquidez, las instituciones financieras ya no necesitan ofrecer tasas elevadas para atraer a los ahorradores, lo que ha llevado a una estabilización en los rendimientos ofrecidos.
**Desafíos y Oportunidades en las Cooperativas de Ahorro**
Por otro lado, las cooperativas de ahorro y crédito han enfrentado un panorama más complicado. Aunque tradicionalmente ofrecían tasas de interés más altas que los bancos, la competencia con las entidades bancarias entre 2022 y 2024 fue feroz. A pesar de sus esfuerzos por mantener tasas atractivas, muchas cooperativas no pudieron seguir el ritmo de los bancos, lo que resultó en una disminución de la colocación de créditos y un aumento en la morosidad. En 2024, el sector cooperativo se vio afectado por la recesión económica y la inseguridad, lo que complicó aún más su situación.
A medida que avanzamos en 2025, las cooperativas han comenzado a experimentar una leve recuperación, pero las tasas de interés que ofrecen también han disminuido. En julio de 2024, la tasa promedio de las cooperativas era de 8,4% anual, pero para julio de 2025, esta cifra había caído a 7,4% anual, el nivel más bajo desde octubre de 2022. A pesar de esta caída, las cooperativas aún pueden ofrecer rendimientos superiores a los de la banca, lo que las convierte en una opción atractiva para ciertos ahorradores.
Sin embargo, es crucial que los ahorradores comprendan los riesgos asociados con las cooperativas, especialmente aquellas de menor tamaño. Las cooperativas del segmento 4 y 5, que ofrecen tasas de interés más altas, también presentan un mayor riesgo debido a la falta de regulaciones estrictas y controles por parte de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria. El seguro de depósitos de la Cosede, que protege a los ahorradores en caso de liquidación de una cooperativa, cubre montos significativamente más bajos en estas entidades más pequeñas, lo que aumenta la exposición al riesgo para los inversores.
Diego Peña, asesor financiero, enfatiza que los ahorradores deben ser conscientes de que a mayor riesgo, mayor rentabilidad. En Ecuador, existen 397 cooperativas agrupadas en cinco segmentos, y las tasas de interés varían considerablemente entre ellas. Las cooperativas más grandes, que tienen más controles y regulaciones, ofrecen seguros de depósitos más altos, lo que las hace más seguras para los ahorradores.
En resumen, el panorama de las tasas de interés en Ecuador está en constante evolución, y tanto los bancos como las cooperativas de ahorro y crédito están adaptándose a las nuevas realidades económicas. Los ahorradores deben evaluar cuidadosamente sus opciones, considerando tanto el potencial de rentabilidad como los riesgos asociados con cada tipo de institución financiera. La clave para una inversión exitosa radica en la comprensión de estos factores y en la toma de decisiones informadas que se alineen con los objetivos financieros personales.