El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha tomado una decisión significativa al trasladar temporalmente la sede de la Función Ejecutiva a Latacunga, una medida que se ha implementado en un contexto de cambios económicos y sociales en el país. Este movimiento, realizado el 13 de septiembre de 2025, se produce un día después de que Noboa anunciara la eliminación del subsidio al diésel, una medida que ha generado reacciones mixtas entre los diferentes sectores de la sociedad ecuatoriana.
La decisión de trasladar la sede gubernamental a Latacunga, capital de la provincia de Cotopaxi, busca garantizar la gobernabilidad y mantener un diálogo directo con la ciudadanía. Noboa ha designado a la vicepresidenta María José Pinto para que ejerza temporalmente las funciones asignadas desde Otavalo, lo que refleja un intento de acercar el gobierno a las comunidades locales y responder a las inquietudes de la población.
### La Eliminación del Subsidio al Diésel
La eliminación del subsidio al diésel es una de las decisiones más controvertidas que ha tomado el gobierno de Noboa. Esta medida, que se espera genere un ahorro de 1.100 millones de dólares en el gasto estatal, ha sido justificada por el gobierno como una forma de redirigir recursos hacia medidas de protección social y subvenciones para incentivar la producción nacional. Sin embargo, la reacción de los sectores productivos ha sido negativa, especialmente del sector del transporte público, que ha anunciado una paralización programada para el 15 de septiembre.
El presidente Noboa ya había eliminado el subsidio a las gasolinas Extra y Eco País el año anterior, lo que ha llevado a que los precios al consumidor se alineen con los valores internacionales. Esta estrategia de eliminación de subsidios ha sido un tema delicado en la política ecuatoriana, ya que los intentos previos de presidentes como Lenin Moreno y Guillermo Lasso de implementar cambios similares resultaron en protestas masivas y descontento social.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), una de las organizaciones sociales más influyentes del país, ha calificado la eliminación del subsidio al diésel como un «nuevo paquetazo» y ha advertido que el gobierno está llevando al límite la paciencia popular. La Conaie ha sido un actor clave en las protestas de 2019 y 2022, y su oposición a las políticas de Noboa podría indicar un posible resurgimiento de la movilización social en respuesta a estas medidas.
### Implicaciones Sociales y Económicas
La eliminación del subsidio al diésel no solo afecta a los precios del combustible, sino que también tiene implicaciones más amplias para la economía ecuatoriana. Los sectores de transporte y producción, que dependen en gran medida de este subsidio, se enfrentan a un aumento en sus costos operativos, lo que podría trasladarse a los consumidores en forma de precios más altos. Esto plantea un desafío adicional para las familias ecuatorianas, que ya enfrentan dificultades económicas en un contexto de inflación y aumento del costo de vida.
Además, la decisión de trasladar la sede del gobierno a Latacunga puede ser vista como un intento de Noboa de mostrar un compromiso con las regiones fuera de la capital, Quito. Sin embargo, este movimiento también puede ser interpretado como una estrategia para desviar la atención de las críticas y el descontento que genera la eliminación del subsidio. La capacidad del gobierno para manejar esta situación dependerá en gran medida de su habilidad para comunicarse efectivamente con la ciudadanía y abordar sus preocupaciones.
El futuro de la política económica de Noboa se encuentra en un punto crítico. La eliminación de subsidios ha sido una estrategia utilizada por varios gobiernos en América Latina, pero su éxito depende de la capacidad de los líderes para implementar medidas compensatorias efectivas y mantener un diálogo abierto con la población. La respuesta de los sectores afectados, especialmente el transporte público y las organizaciones sociales, será crucial para determinar la estabilidad política y social en Ecuador en los próximos meses.
En resumen, el traslado temporal de la sede de la Función Ejecutiva a Latacunga y la eliminación del subsidio al diésel son decisiones que reflejan un momento de cambio en la política ecuatoriana. A medida que el gobierno de Noboa navega por estas aguas turbulentas, la forma en que maneje la comunicación y la respuesta a las preocupaciones de la ciudadanía será fundamental para su éxito y la estabilidad del país.
