La situación económica de Ecuador ha estado marcada por un creciente peso de la deuda pública, que ha generado preocupaciones sobre la sostenibilidad fiscal del país. En un análisis reciente, se ha revelado que el pago de intereses de la deuda pública ha aumentado de manera alarmante en los últimos 15 años, alcanzando cifras que superan el presupuesto destinado al Ministerio de Educación. Este fenómeno no solo afecta la capacidad del gobierno para invertir en áreas críticas, sino que también plantea interrogantes sobre la gestión fiscal y la dependencia de financiamiento externo.
**Crecimiento Exponencial de los Intereses de la Deuda**
Desde 2009, el pago de intereses de la deuda pública en Ecuador ha crecido de manera exponencial. En ese año, el país destinó USD 532 millones para cubrir estos intereses, pero para 2024, esta cifra se disparó a USD 3.483 millones. Este incremento representa un aumento de casi seis veces en un periodo de 15 años. En 2024, los intereses de la deuda representaron el 14% del gasto público total, que ascendió a USD 25.242 millones. Este aumento en los pagos de intereses ha generado un impacto significativo en el presupuesto nacional, limitando la capacidad del gobierno para financiar otros sectores esenciales como la educación y la salud.
El gobierno de Daniel Noboa ha enfrentado un desafío considerable, ya que el pago de intereses en 2024 superó el presupuesto asignado al Ministerio de Educación, que fue de USD 3.283 millones. Esta situación ha llevado a un aumento en la presión sobre el presupuesto general del estado, lo que ha llevado a la necesidad de buscar financiamiento adicional para cubrir el déficit. Para 2025, se proyecta que el pago de intereses será de USD 3.309 millones, aunque esta cifra podría ajustarse en función de las decisiones del gobierno y la situación económica del país.
**Factores que Contribuyen al Aumento de la Deuda**
El crecimiento de la deuda pública en Ecuador no es un fenómeno aislado, sino que está relacionado con varios factores estructurales y externos. Uno de los principales problemas es el déficit persistente en el presupuesto del estado. Cada año, el gobierno se ve obligado a recurrir a préstamos internos y externos para cubrir no solo los pagos de deuda existentes, sino también para hacer frente a un déficit que se ha vuelto crónico. En 2024, el déficit fue de USD 2.483 millones, y para mayo de 2025, ya se había acumulado un déficit de USD 1.255 millones.
Además, el contexto internacional ha influido en el costo de la deuda. Tras la pandemia de Covid-19, la Reserva Federal de Estados Unidos cambió su política monetaria, lo que resultó en un aumento de las tasas de interés. Esto ha encarecido la deuda externa de Ecuador, ya que una parte significativa de esta deuda tiene tasas variables que dependen de las decisiones de la FED. Por ejemplo, la tasa de interés promedio de la deuda externa pasó del 3,10% en mayo de 2022 al 4,51% en mayo de 2025. Este aumento en las tasas de interés ha llevado a un incremento en los pagos de intereses, lo que agrava aún más la situación fiscal del país.
El exviceministro de Finanzas, Daniel Lemus, ha señalado que la combinación de un gasto público descontrolado y un aumento en las tasas de interés ha creado un entorno financiero complicado para Ecuador. La estructura del presupuesto ha cambiado, con un creciente porcentaje destinado al servicio de la deuda, que se espera que alcance el 6,7% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2025. En contraste, el presupuesto destinado al Plan Anual de Inversiones se ha reducido a solo el 1,1% del PIB, lo que limita las oportunidades de inversión en infraestructura y desarrollo social.
La situación actual plantea un dilema para el gobierno ecuatoriano: ¿cómo equilibrar la necesidad de pagar la deuda con la urgencia de invertir en el desarrollo del país? La dependencia de financiamiento externo y el aumento de la deuda pública son cuestiones que requieren atención urgente. Sin una estrategia clara para controlar el gasto y aumentar los ingresos, Ecuador podría enfrentar un futuro económico incierto, con un creciente riesgo de crisis fiscal.
En resumen, el aumento de la deuda pública en Ecuador es un problema complejo que involucra múltiples factores, desde la gestión fiscal interna hasta las condiciones económicas globales. La capacidad del gobierno para abordar estos desafíos será crucial para garantizar la estabilidad económica y el bienestar de la población en los próximos años.