La reciente decisión del Gobierno de Ecuador de poner fin al acuerdo migratorio con Venezuela ha generado un amplio debate sobre las implicaciones que esta medida tendrá para los migrantes venezolanos en el país. Este tratado, que fue firmado en 2010, permitía a los ciudadanos venezolanos acceder a ciertos beneficios en Ecuador, pero las circunstancias han cambiado drásticamente en la última década. La crisis económica y política en Venezuela ha llevado a un aumento significativo en el número de migrantes que buscan refugio en otros países, incluido Ecuador, donde se estima que más de 150,000 venezolanos han legalizado su estatus.
### Contexto del Acuerdo Migratorio
El acuerdo migratorio entre Ecuador y Venezuela fue establecido en un momento en que la migración ecuatoriana hacia Venezuela era más alta que la migración en sentido contrario. Ricardo Patiño, quien fue canciller durante la firma del tratado, ha reconocido que este acuerdo benefició a muchos ecuatorianos que buscaban oportunidades en el país vecino. Sin embargo, la situación ha cambiado drásticamente. Hoy en día, miles de venezolanos están huyendo de su país en busca de mejores condiciones de vida, y Ecuador ha sido uno de los destinos más elegidos.
El presidente Daniel Noboa, al firmar un decreto el 1 de agosto de 2025, solicitó a la Cancillería que inicie el proceso para disolver este tratado. La decisión fue aprobada por la Asamblea Nacional el 27 de agosto, con el respaldo de la Comisión de Relaciones Internacionales, que está dominada por el movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN). La presidenta de esta comisión, Lucía Jaramillo, argumentó que el tratado ya no cumplía su objetivo y que Ecuador había hecho su parte al abrir sus puertas a los venezolanos en un momento crítico.
### Implicaciones de la Disolución del Tratado
La disolución del acuerdo migratorio con Venezuela tiene varias implicaciones para los ciudadanos venezolanos que residen en Ecuador. Aunque Jaramillo ha asegurado que los derechos de los venezolanos en el país están garantizados y que seguirán teniendo acceso a servicios esenciales como salud y educación, la eliminación del tratado significa que ya no habrá procesos especiales de regularización. Esto implica que los venezolanos deberán cumplir con los mismos requisitos que cualquier otro extranjero que desee residir en Ecuador.
La amnistía migratoria que estaba vigente para los venezolanos, establecida en el Decreto 370, también se verá afectada. Este decreto permitía a los venezolanos regularizar su estatus de manera más sencilla, pero con la disolución del tratado, este tipo de facilidades ya no estarán disponibles. Esto podría complicar la situación de muchos venezolanos que buscan establecerse en Ecuador de manera legal.
El debate en la Asamblea sobre la disolución del tratado fue relativamente calmado, a pesar de las tensiones políticas que rodean la situación en Venezuela. Patiño, aunque no está de acuerdo con la decisión, optó por abstenerse en la votación, señalando que lo ideal sería establecer acuerdos que beneficien a los ciudadanos de ambos países. Por otro lado, los partidos que apoyaron la disolución del tratado, como ADN y el Partido Social Cristiano (PSC), argumentaron que era necesario priorizar los intereses nacionales de Ecuador.
La situación en Venezuela sigue siendo crítica, y la migración hacia Ecuador no muestra signos de disminuir. Con la disolución del acuerdo migratorio, muchos venezolanos se enfrentarán a un proceso más complicado para regularizar su estatus, lo que podría llevar a un aumento en la informalidad y la vulnerabilidad de esta población en Ecuador. La falta de un marco legal claro podría también afectar la percepción pública hacia los migrantes, generando tensiones sociales en un contexto ya complicado por la crisis económica que enfrenta Ecuador.
La decisión de Ecuador de terminar el acuerdo migratorio con Venezuela es un reflejo de las complejidades que enfrenta el país en su manejo de la migración y la necesidad de equilibrar las políticas internas con las realidades externas. A medida que la situación en Venezuela continúa evolucionando, será crucial observar cómo estas políticas afectan a los migrantes y qué medidas se implementarán para garantizar sus derechos y bienestar en Ecuador.