El 3 de octubre de 2025, la Corte Constitucional de Ecuador aprobó la inclusión de una nueva pregunta en el referéndum que se llevará a cabo el 16 de noviembre. Esta pregunta, propuesta por el presidente Daniel Noboa, busca consultar a la ciudadanía sobre la reducción del número de asambleístas en la Asamblea Nacional. Este movimiento ha generado un amplio debate en el país, ya que podría tener un impacto significativo en la estructura política y la representación en el legislativo.
### Contexto del Referéndum
La propuesta de reducir el número de asambleístas surge en un contexto donde la eficiencia y la representatividad del sistema político ecuatoriano están bajo la lupa. La Asamblea Nacional, compuesta actualmente por 137 miembros, ha sido criticada por su funcionamiento y la percepción de que no representa adecuadamente a la población. La pregunta que se someterá a votación es: «¿Está usted de acuerdo con reducir el número de asambleístas y que se los elija de acuerdo con los siguientes criterios: 10 asambleístas nacionales; 1 asambleísta elegido por cada provincia; y 1 asambleísta provincial adicional por cada 400.000 habitantes de acuerdo al último censo nacional?».
Este referéndum no solo incluye la cuestión de la reducción de asambleístas, sino que también aborda otros temas importantes, como la presencia de bases militares extranjeras en el país y la financiación de organizaciones políticas con recursos públicos. La consulta popular, por su parte, se centra en la posibilidad de convocar a una Asamblea Constituyente que redacte una nueva Constitución, lo que añade una capa adicional de complejidad al proceso.
### Implicaciones de la Reducción de Asambleístas
La reducción del número de asambleístas podría tener varias implicaciones para el sistema político ecuatoriano. En primer lugar, se espera que una menor cantidad de legisladores pueda facilitar la toma de decisiones y mejorar la eficiencia legislativa. Sin embargo, también existe el riesgo de que una reducción en la representación pueda llevar a una menor diversidad de opiniones y a una representación menos equitativa de las diferentes regiones del país.
La propuesta de Noboa ha sido recibida con reacciones mixtas. Algunos sectores de la población y analistas políticos ven esta medida como un paso necesario hacia una mayor eficiencia en el gobierno, mientras que otros advierten sobre los peligros de concentrar el poder en un número reducido de representantes. La inclusión de criterios específicos para la elección de los asambleístas también ha generado debate, ya que podría favorecer a ciertas regiones sobre otras, dependiendo de la distribución poblacional.
Además, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ya ha comenzado a trabajar en el diseño de la papeleta para el referéndum, lo que indica que el proceso está avanzando rápidamente. La inclusión de esta nueva pregunta en el referéndum podría influir en la participación ciudadana, ya que muchos votantes podrían sentirse más motivados a participar si se les presenta una cuestión que afecta directamente la estructura de su representación política.
### Reacciones y Expectativas
Las reacciones a la decisión de la Corte Constitucional han sido diversas. Algunos líderes políticos y organizaciones sociales han expresado su apoyo a la medida, argumentando que es un paso hacia la modernización del sistema político ecuatoriano. Por otro lado, hay quienes critican la falta de un debate más profundo sobre las implicaciones de esta reducción y la necesidad de garantizar que todos los sectores de la sociedad estén adecuadamente representados.
La Corte Constitucional, al dar luz verde a esta propuesta, reafirma su papel como garante de la Constitución y de los derechos ciudadanos. Esto es crucial en un momento en que la confianza en las instituciones políticas está en niveles bajos. La capacidad de la Corte para tomar decisiones que reflejen las necesidades y deseos de la población será fundamental para el éxito del referéndum.
Con la fecha del referéndum acercándose, la atención se centrará en cómo se desarrollará la campaña informativa y qué estrategias se implementarán para asegurar que los ciudadanos estén debidamente informados sobre las preguntas que se les plantearán. La participación activa de la ciudadanía será clave para el futuro político del país, y el referéndum de noviembre podría marcar un punto de inflexión en la historia reciente de Ecuador.