En el contexto actual de Ecuador, el Gobierno de Daniel Noboa enfrenta un reto significativo en la gestión de sus finanzas públicas. Con un déficit presupuestario creciente, la administración ha decidido adelantar el pago del décimo tercer sueldo a los empleados públicos, lo que implica la necesidad de obtener recursos adicionales en un corto plazo. Este artículo explora las implicaciones de esta decisión y los desafíos que presenta para el Ministerio de Finanzas.
El gasto público en Ecuador ha mostrado un aumento notable en 2025, alcanzando la cifra de USD 19.604 millones entre enero y septiembre, lo que representa un incremento de USD 2.009 millones en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este aumento en el gasto se produce en un año electoral, donde el Gobierno ha implementado nuevos bonos y ayudas económicas. Sin embargo, la situación se complica con la promesa de adelantar el pago del décimo tercer sueldo, que se espera sea realizado el 14 de noviembre, justo antes de la consulta popular programada para el 16 de noviembre.
### Necesidades Financieras y Recursos Disponibles
Para cumplir con el adelanto del décimo tercer sueldo, el Gobierno necesitará alrededor de USD 400 millones, además de los aproximadamente USD 770 millones que se requieren para el pago de sueldos de noviembre. En total, esto suma aproximadamente USD 1.170 millones que el Ministerio de Finanzas debe gestionar para cumplir con sus obligaciones. Sin embargo, la situación financiera del país es delicada, ya que hasta el 22 de octubre de 2025, el Estado había gastado USD 1.750 millones más de lo que había ingresado, lo que genera un déficit fiscal que debe ser abordado con urgencia.
El exministro de Finanzas, Fausto Ortiz, ha señalado que aunque los USD 400 millones no son una suma exorbitante, el Gobierno debe encontrar formas de financiar este gasto adicional. Es importante destacar que los fondos que se esperan recibir del Fondo Monetario Internacional (FMI) no pueden ser utilizados para el pago de sueldos, ya que por ley, estos deben ser cubiertos con ingresos permanentes, como los impuestos recaudados por el Estado. Esto limita las opciones del Gobierno para cubrir el déficit y cumplir con sus promesas.
### Estrategias para Manejar el Gasto Público
A pesar de las restricciones, existen algunas estrategias que el Gobierno podría considerar para manejar el gasto público y cumplir con sus compromisos. Una opción es la reorientación de recursos no utilizados en otras áreas del presupuesto. Según el economista Jorge Calderón, hay entidades que no han ejecutado sus presupuestos de manera completa, lo que podría permitir al Gobierno redirigir esos fondos hacia el pago del décimo tercer sueldo.
Además, el Gobierno podría optar por aumentar las cuentas atrasadas con proveedores y otros organismos, lo que le permitiría diferir algunos pagos y gestionar mejor su flujo de caja. Sin embargo, esta estrategia podría generar tensiones con los proveedores y afectar la confianza en la gestión pública.
El contexto electoral también juega un papel crucial en esta situación. La promesa de adelantar el décimo tercer sueldo puede ser vista como una estrategia para ganar apoyo popular antes de la consulta popular. Sin embargo, esto plantea la pregunta de si el Gobierno está priorizando el gasto en beneficios inmediatos sobre la sostenibilidad fiscal a largo plazo.
En resumen, el adelanto del décimo tercer sueldo representa un desafío significativo para el Gobierno de Noboa, que debe encontrar soluciones creativas para financiar este gasto en un contexto de déficit fiscal creciente. La gestión de las finanzas públicas en Ecuador se enfrenta a un momento crítico, donde las decisiones tomadas en los próximos meses tendrán un impacto duradero en la economía del país y en la confianza de los ciudadanos en su administración.
