El 24 de mayo de 2025, Daniel Noboa Azín fue investido como presidente de Ecuador en una ceremonia celebrada en la Asamblea Nacional. Este evento marca su segundo mandato, siendo el primero completo tras haber ganado la segunda vuelta electoral contra la candidata correísta Luisa González. La ceremonia, que comenzó a las 11:00, fue precedida por una serie de actividades que Noboa realizó en conmemoración de la Batalla de Pichincha, un hito histórico en la lucha por la independencia del país.
**Ceremonia de Investidura**
La investidura de Noboa se llevó a cabo en un ambiente de gran expectación, con la presencia de más de 70 delegaciones internacionales. La sesión fue convocada para las 11:00, pero el presidente electo ya había comenzado su jornada en la Cima de la Libertad, donde participó en actos conmemorativos de la Batalla de Pichincha. Este enfrentamiento, que tuvo lugar en 1822, fue crucial para la independencia de Ecuador y simboliza la lucha por la libertad del país.
A las 10:00, Noboa se dirigió a la Plaza Grande, en el Centro Histórico de Quito, donde se reunió con simpatizantes y beneficiarios de programas sociales del gobierno. Este encuentro ciudadano fue un momento significativo, ya que permitió al presidente electo conectar directamente con la población antes de asumir oficialmente el cargo. La ceremonia de investidura se inició con el ingreso del estandarte nacional y el canto del himno, seguido por el juramento de Noboa, quien recibió la banda presidencial de manos del presidente de la Asamblea, Niels Olsen.
**Despliegue de Seguridad y Asistencia Internacional**
La ceremonia de posesión estuvo marcada por un amplio operativo de seguridad, con más de 1,000 policías desplegados en el área. Las calles aledañas a la Asamblea Nacional fueron cerradas desde la medianoche para garantizar la seguridad del evento. A pesar de la gran afluencia de público, la bancada de la Revolución Ciudadana decidió no asistir a la ceremonia, argumentando que no validan una investidura que consideran nacida del fraude.
Entre los invitados destacados se encontraban los presidentes de Colombia y Perú, Gustavo Petro y Dina Boluarte, respectivamente. Ambos líderes expresaron su compromiso de fortalecer los lazos de amistad y cooperación entre sus países y Ecuador. Además, el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert Kennedy Jr., también estuvo presente, lo que subraya la importancia internacional del evento.
La llegada de los invitados fue un momento de gran relevancia, con figuras políticas y familiares de Noboa, como su madre, Annabella Azín, y su tía, Isabel Noboa, entre otros. La ceremonia no solo fue un acto formal, sino también un símbolo de unidad y esperanza para el futuro del país, como lo destacó Niels Olsen en su discurso inaugural.
**Expectativas y Retos del Nuevo Mandato**
Con la asunción de Noboa, se espera que su gobierno aborde varios desafíos críticos que enfrenta Ecuador, incluyendo la seguridad, la economía y la salud pública. Durante su discurso, el presidente reelecto enfatizó la necesidad de trabajar en conjunto con el Legislativo para enfrentar las adversidades y construir un futuro mejor para todos los ecuatorianos. Noboa se comprometió a no retroceder ante las mafias que amenazan la paz y la estabilidad del país, un mensaje que resonó fuertemente entre sus seguidores.
La ceremonia de investidura de Daniel Noboa no solo marcó el inicio de su segundo mandato, sino que también fue un recordatorio de la importancia de la democracia y la participación ciudadana en el proceso político. A medida que el nuevo presidente se prepara para enfrentar los retos que se avecinan, la atención de la nación y del mundo estará puesta en sus decisiones y acciones en los próximos años.