El mundo del entretenimiento a menudo se ve envuelto en controversias y dramas que capturan la atención del público. Recientemente, Leonardo Quezada, conocido como Lazito de la farándula, se ha convertido en el centro de una disputa legal tras ser demandado por Sarah Gabriela Alarcón, hija de la ex presentadora Gabriela Pazmiño Yépez. Esta situación ha generado un gran revuelo en las redes sociales y en los medios de comunicación, debido a las implicaciones que tiene sobre la reputación de los involucrados y las posibles consecuencias legales que podrían derivarse de este caso.
### El Origen de la Controversia
La controversia comenzó cuando Lazito, en su programa «Los Hackers», hizo comentarios que vincularon a Sarah Gabriela con Cezar Augusto, quien fue pareja de la ex Miss Ecuador, Virginia Limongi. Estos comentarios fueron considerados por Alarcón como difamatorios y perjudiciales para su imagen pública. En respuesta a esta situación, Sarah decidió tomar acciones legales el 9 de julio, argumentando que las afirmaciones realizadas en el programa afectaron su reputación y su buen nombre.
A través de su abogado, Carlos Luis Sánchez, Sarah presentó una denuncia formal en la Unidad Judicial Norte 1 Penal de Guayaquil. En su declaración, el abogado expresó su preocupación por la demora en la citación de Lazito, afirmando que «la citación debería darse sin problemas» dado que se conoce el paradero del denunciado. Esta situación ha llevado a que el abogado se queje formalmente ante el juez, argumentando que no hay excusa para la falta de notificación.
La denuncia se basa en el artículo 396 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), que sanciona a quienes realicen expresiones que desacrediten o humillen a otra persona. Si se comprueba la falta, Lazito podría enfrentar hasta 30 días de prisión y la obligación de reparar el daño causado a Sarah Gabriela. El caso ya ha sido aceptado para revisión por el juez Nelson Rojas Barros, quien firmó el documento correspondiente el 16 de julio de 2025, lo que marca el inicio del proceso judicial.
### Reacciones y Consecuencias
Mientras el proceso legal avanza, el entorno de Sarah Gabriela se mantiene firme en su decisión de no ceder ante la situación. Fuentes cercanas a la influencer han indicado que intentaron contactar a Gabriela Pazmiño, madre de Sarah, pero ella se ha negado a hacer declaraciones, reafirmando su postura de no ceder ante la presión. Por otro lado, Lazito ha adoptado una actitud relajada frente a la situación, minimizando la gravedad de la demanda y asegurando a sus cercanos que no le preocupa el asunto.
Este tipo de controversias no son nuevas en el mundo del entretenimiento, donde la línea entre la libertad de expresión y la difamación a menudo se vuelve difusa. La situación de Lazito y Sarah Gabriela pone de relieve la importancia de la responsabilidad que tienen los comunicadores al emitir juicios o comentarios sobre la vida personal de otros, especialmente cuando estos pueden tener repercusiones legales.
El caso ha captado la atención de los seguidores de ambos personajes, quienes han expresado sus opiniones en redes sociales. Algunos apoyan a Sarah, argumentando que tiene derecho a proteger su imagen, mientras que otros defienden a Lazito, alegando que su trabajo como presentador implica un grado de dramatización y entretenimiento que no debería tomarse de manera literal.
La resolución de este caso no solo afectará a las partes involucradas, sino que también podría sentar un precedente en el ámbito de la libertad de expresión en los medios de comunicación. La forma en que se manejen las declaraciones y los comentarios en programas de entretenimiento podría verse influenciada por el resultado de este proceso legal.
A medida que se desarrolla la situación, los seguidores de ambos personajes continúan atentos a las actualizaciones del caso, esperando ver cómo se resolverá esta controversia que ha capturado la atención del público y ha puesto en el centro del debate temas como la difamación, la libertad de expresión y la responsabilidad en los medios de comunicación.