El 9 de octubre de 2025, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, firmó el decreto ejecutivo número 180, que establece un nuevo mecanismo de compensación mensual para los propietarios de vehículos comerciales que utilizan diésel. Esta medida surge como respuesta al reciente aumento en el precio del diésel, que ha generado preocupación entre los transportistas y ha llevado a movilizaciones sociales en el país. El objetivo principal de este decreto es proteger a los prestadores de servicios de transporte comercial, garantizando que puedan continuar operando a pesar de los incrementos en los costos de combustible.
### Detalles del Mecanismo de Compensación
El decreto establece que las compensaciones se aplicarán a cinco tipos de vehículos: carga pesada, carga liviana, transporte mixto, transporte escolar e institucional. Para ser beneficiarios de esta compensación, los propietarios deben cumplir con ciertos requisitos. Primero, deben estar registrados y activos en la Agencia Nacional de Regulación y Control de Transporte Terrestre. Además, es necesario que utilicen diésel como combustible y que cumplan con los criterios específicos que serán definidos por el Comité de Optimización Energética.
Las compensaciones se realizarán a través de transferencias bancarias o mediante retiros en ventanilla, dependiendo de la preferencia del beneficiario. El monto de la compensación se calculará en función del volumen de consumo de diésel, multiplicado por la diferencia entre el precio de venta al público, que se ha fijado en USD 1.79 por galón, y el precio regulado por el gobierno. Este enfoque busca asegurar que los transportistas reciban un apoyo financiero proporcional a sus necesidades.
### Impacto del Aumento del Precio del Diésel
El aumento en el precio del diésel ha sido un tema candente en Ecuador, provocando protestas y paros por parte de diversos sectores sociales, especialmente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie). La eliminación del subsidio al diésel ha generado un descontento significativo, ya que muchos transportistas consideran que sus márgenes de ganancia se han visto severamente afectados. La situación ha llevado a un paro nacional que ya lleva 18 días sin una solución clara.
Los gasolineros también han expresado su preocupación, indicando que la venta de diésel se ha vuelto insostenible sin una revisión de los márgenes de ganancia. Este contexto ha hecho que la implementación del decreto de compensación sea aún más crítica, ya que busca mitigar el impacto económico en los transportistas y asegurar la continuidad de los servicios de transporte en el país.
El gobierno ha indicado que la actualización de la información de matriculación vehicular será responsabilidad de los Gobiernos Autónomos Descentralizados Municipales. Esto es fundamental para que la Agencia de Regulación pueda generar una base de datos precisa de los beneficiarios, asegurando que las compensaciones lleguen a quienes realmente las necesitan.
### Reacciones y Expectativas
La reacción a la implementación de este decreto ha sido mixta. Por un lado, muchos transportistas ven la compensación como un alivio necesario en un momento de crisis. Sin embargo, otros son escépticos sobre la efectividad del mecanismo y la rapidez con la que se implementará. La incertidumbre sobre el monto de las compensaciones y la burocracia asociada a su obtención también generan dudas entre los potenciales beneficiarios.
El gobierno, por su parte, ha manifestado su compromiso de trabajar en conjunto con los sectores afectados para garantizar que las compensaciones sean efectivas y que se logre una estabilidad en el sector del transporte. La situación actual es un reflejo de los desafíos que enfrenta Ecuador en términos de política energética y social, y la respuesta del gobierno será crucial para determinar el futuro del transporte comercial en el país.
En resumen, la creación de un mecanismo de compensación mensual para vehículos diésel representa un paso significativo por parte del gobierno ecuatoriano para abordar las preocupaciones de los transportistas ante el aumento del precio del combustible. A medida que se implementen estas medidas, será esencial monitorear su efectividad y el impacto que tendrán en la economía y en la vida diaria de los ciudadanos ecuatorianos.