La situación de los migrantes en Estados Unidos ha cambiado drásticamente con las nuevas regulaciones sobre la renovación de permisos de trabajo, específicamente el Employment Authorization Document (EAD). Este documento es esencial para muchos, ya que les permite trabajar legalmente en el país. Sin embargo, la reciente eliminación de las extensiones automáticas ha generado incertidumbre y preocupación entre los migrantes, quienes ahora deben estar más atentos a los plazos y requisitos para evitar quedar sin empleo.
### Nuevas Regulaciones y su Impacto en los Migrantes
Desde octubre de 2025, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) implementó una nueva normativa que pone fin a las extensiones automáticas de los EAD para la mayoría de las categorías de solicitantes. Anteriormente, si un migrante solicitaba la renovación de su permiso a tiempo, podía continuar trabajando hasta 540 días mientras esperaba la aprobación de su solicitud. Sin embargo, con los cambios recientes, esta gracia ya no existe, lo que significa que si un EAD expira, el migrante debe presentar una nueva solicitud y demostrar su elegibilidad desde cero.
Este cambio afecta a muchos migrantes, especialmente a aquellos que están en proceso de asilo o que tienen solicitudes de residencia pendientes. La abogada de inmigración Andrea Soto explica que los únicos que quedan exentos de esta nueva regla son los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS), que actualmente no incluye a Ecuador. Esto implica que muchos migrantes ecuatorianos, que dependen de su EAD para trabajar y mantener a sus familias, se enfrentan a un futuro incierto.
La preocupación es palpable entre los migrantes. Laura, una trabajadora de limpieza en Nueva York, se encuentra en una situación angustiante. Su EAD vence pronto y, a pesar de que su jefa le ha asegurado que no la despedirá, teme que cualquier cambio en la situación laboral pueda dejarla sin empleo. Por otro lado, Rodrigo, quien ha trabajado en una empresa de logística durante tres años, también se siente confundido sobre si debe renovar su permiso o si aún puede beneficiarse de la extensión automática. Esta falta de claridad es común entre muchos migrantes que buscan información confiable sobre sus derechos y opciones.
### Estrategias para la Renovación del EAD
Ante esta nueva realidad, es crucial que los migrantes tomen medidas proactivas para asegurar su estatus laboral. La abogada Soto recomienda que aquellos cuyo EAD está por expirar busquen asesoría legal con suficiente antelación. No es recomendable esperar hasta el último momento, ya que esto puede llevar a situaciones complicadas donde el migrante se quede sin permiso para trabajar.
Si el EAD ya ha caducado, el recibo de renovación emitido por el Departamento de Inmigración puede servir como prueba de que se está tramitando la renovación, aunque no garantiza que la persona esté autorizada para trabajar. Esto puede poner a los empleadores en una situación difícil, ya que algunos podrían optar por despedir a sus empleados si no tienen un permiso válido. En algunos casos, los empleadores pueden decidir clasificar a los trabajadores como contratistas independientes, lo que les permite evitar sanciones, pero esto no siempre es una solución viable para los migrantes.
La confusión también se ve alimentada por la desinformación que circula en redes sociales. Muchos migrantes creen erróneamente que trabajar sin un permiso puede perjudicar su solicitud de asilo. La abogada Soto aclara que, si un juez pregunta sobre el estatus laboral durante una audiencia, el migrante debe responder con honestidad, lo que podría complicar su caso. Por lo tanto, es fundamental que los migrantes se mantengan informados y busquen asesoría legal adecuada para evitar problemas futuros.
En resumen, la eliminación de las extensiones automáticas de los EAD ha creado un ambiente de incertidumbre para muchos migrantes en Estados Unidos. Con la nueva normativa, es más importante que nunca que los migrantes se mantengan informados sobre sus derechos y opciones, y que busquen ayuda legal con anticipación para asegurar su capacidad de trabajar y vivir sin miedo a perder su estatus. La situación de Laura y Rodrigo es un reflejo de la realidad de miles de migrantes que, a pesar de las dificultades, continúan luchando por un futuro mejor en un país que les ofrece oportunidades, pero también desafíos significativos.