La LigaPro, el torneo de fútbol más importante de Ecuador, está en constante evolución. Con la llegada del año 2026, los dirigentes de los clubes han comenzado a evaluar si el formato actual del campeonato debe ser modificado. Miguel Ángel Loor, presidente de la LigaPro, ha sido claro en sus declaraciones sobre este tema, indicando que se tomará una decisión definitiva en diciembre de este año. Este artículo explora los cambios recientes en el formato del torneo y las posibles modificaciones que se avecinan.
### Evolución del Formato del Torneo
Desde su creación, la LigaPro ha experimentado diversas transformaciones en su estructura. Hasta el año 2024, el campeonato se disputaba en dos etapas, donde los ganadores de cada una se enfrentaban en una final para determinar al campeón. Sin embargo, en 2025 se implementó un nuevo sistema que ha generado tanto expectativas como críticas entre los aficionados y expertos del fútbol ecuatoriano.
El nuevo formato elimina las finales y establece dos hexagonales en la etapa decisiva del torneo. Uno de estos hexagonales determinará al campeón de la LigaPro y los equipos que clasificarán a la Copa Libertadores, mientras que el otro definirá quiénes obtendrán un boleto para la Copa Sudamericana. Este cambio busca hacer el torneo más emocionante y competitivo, permitiendo que los equipos tengan más oportunidades de demostrar su valía a lo largo de la temporada.
Por ejemplo, si la fase de todos contra todos terminara hoy, el líder actual, Independiente del Valle, comenzaría la etapa decisiva con una ventaja significativa de puntos sobre su más cercano competidor, Liga de Quito. Este sistema de puntos acumulados ha sido diseñado para premiar la consistencia y el rendimiento a lo largo del torneo, lo que podría resultar en un campeonato más reñido.
Además, se ha establecido un cuadrangular del no descenso, que determinará qué dos equipos descenderán a la Serie B. Esta medida busca mantener la competitividad en la parte baja de la tabla, asegurando que los equipos en riesgo de descenso tengan una última oportunidad de luchar por su permanencia en la máxima categoría del fútbol ecuatoriano.
### La Opinión de los Dirigentes
Miguel Ángel Loor ha manifestado que la decisión sobre el futuro del formato de la LigaPro se tomará en diciembre, después de un análisis exhaustivo por parte de los dirigentes de los clubes. En sus declaraciones, Loor ha enfatizado la importancia de la participación de todos los involucrados en el proceso de toma de decisiones. «Estuvo bien por parte de los dirigentes el buscar cambiar el formato del torneo, sin embargo, en diciembre analizaremos y concluiremos si seguimos o cambiamos», afirmó en una reciente entrevista.
Este enfoque colaborativo es fundamental, ya que el éxito de cualquier cambio en el formato del torneo dependerá de la aceptación y el apoyo de los clubes, jugadores y aficionados. La LigaPro ha demostrado ser un torneo dinámico y adaptable, y los cambios propuestos podrían ser una respuesta a las necesidades y expectativas de un público cada vez más exigente.
La discusión sobre el formato del torneo también se enmarca en un contexto más amplio, donde el fútbol ecuatoriano busca mejorar su competitividad a nivel internacional. Con la participación de equipos ecuatorianos en torneos como la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana, es crucial que la LigaPro ofrezca un campeonato que no solo sea emocionante, sino que también prepare a los clubes para enfrentar desafíos en el ámbito internacional.
Los aficionados al fútbol ecuatoriano están a la expectativa de lo que sucederá en diciembre, cuando se tomen decisiones que podrían cambiar el rumbo del torneo. La participación activa de los clubes y la dirección de la LigaPro serán determinantes para el futuro del campeonato. La evolución del formato no solo impactará a los equipos y jugadores, sino que también influirá en la experiencia de los aficionados, quienes son el corazón del fútbol.
La LigaPro se encuentra en un momento crucial, donde la innovación y la tradición deben encontrar un equilibrio. Los cambios propuestos para 2026 podrían ser la clave para un torneo más atractivo y competitivo, que no solo beneficie a los clubes, sino que también enriquezca la experiencia de los seguidores del fútbol ecuatoriano.