La Isla Puná, una de las parroquias rurales más alejadas de Guayaquil, ha sido el escenario de importantes desarrollos en infraestructura de salud y servicios básicos. En una sesión itinerante del Concejo Municipal, el alcalde Aquiles Alvarez inauguró una nueva Unidad Médica Municipal y anunció la construcción de una planta potabilizadora de agua, ambos proyectos que buscan mejorar la calidad de vida de los habitantes de esta isla.
### Inauguración de la Unidad Médica Municipal
El 31 de julio de 2025, el Concejo Municipal de Guayaquil realizó su sesión número 122 en la Isla Puná, donde se llevó a cabo la inauguración de una Unidad Médica valorada en USD 3,5 millones. Este centro de salud, que había estado abandonado desde 2021, finalmente fue entregado completamente equipado, con una inversión de USD 2,5 millones en infraestructura y un millón adicional en equipamiento médico.
La nueva unidad ofrecerá atención de primer nivel en diversas especialidades, incluyendo obstetricia, odontología y emergencias menores. Además, contará con un área dedicada al bienestar animal y un espacio para niños con discapacidad. El alcalde Alvarez destacó que inicialmente se asignarán cuatro médicos, quienes serán trasladados desde Guayaquil y tendrán alojamiento garantizado. Se espera que la unidad pueda atender a unas 600 personas al mes, aunque su capacidad es mucho mayor.
«Estamos trayendo salud, dignidad y también trabajo para la gente de Puná», afirmó Alvarez, quien también resaltó que la obra generó 350 empleos directos y más de 800 indirectos, priorizando la contratación de personal local. La unidad médica no solo representa un avance en la atención sanitaria, sino que también es un paso hacia la dignificación de la vida de los habitantes de la isla.
### Anuncio de la Planta Potabilizadora de Agua
Durante la misma jornada, el alcalde Aquiles Alvarez anunció la próxima inauguración de una planta potabilizadora de agua, con una inversión de USD 4 millones. Este proyecto beneficiará a más de 6,000 personas de siete comunidades en la isla, abordando una de las principales preocupaciones de los residentes: el acceso a agua potable de calidad.
El sistema de la planta incluirá la captación de agua a 150 metros de profundidad, una planta de tratamiento con capacidad de 6,5 litros, un tanque de reserva de 800 metros cúbicos y una red de más de 50 kilómetros de tuberías. Este esfuerzo busca garantizar que las comunidades de Río Hondo, Campo Alegre, Estero de Boca, Cauchiche, Bella Vista, Subida Alta y Puná Vieja tengan acceso a agua potable, un recurso esencial para la salud y el bienestar de la población.
«Nos preocupa todo lo que dignifica la vida: salud, agua, empleo. Ese es el enfoque con el que trabajamos», expresó Alvarez, subrayando la importancia de estos proyectos en la mejora de la calidad de vida de los habitantes de la isla.
### Contexto de la Isla Puná
Ubicada a 128 kilómetros al sur de Guayaquil, la Isla Puná es la tercera más grande de Ecuador, con una superficie de 919 kilómetros cuadrados. Aislada del continente por el Golfo de Guayaquil, la isla alberga a aproximadamente 15,000 personas distribuidas en 24 comunidades. El acceso a la isla se realiza principalmente por vía fluvial, con recorridos de hora y media en lancha rápida desde Guayaquil.
Durante décadas, los pobladores de Puná han reclamado una mayor presencia estatal y acceso a servicios básicos. A pesar de la inauguración de una planta desalinizadora en 2019, la calidad del agua potable sigue siendo un tema de preocupación para los habitantes de la cabecera parroquial. La reciente inversión en la planta potabilizadora es un paso significativo hacia la solución de este problema.
La sesión del Concejo Municipal en la Isla Puná no solo marcó un hito en la atención sanitaria, sino que también evidenció la necesidad de un enfoque integral en el desarrollo de infraestructura y servicios en áreas rurales. La colaboración entre el gobierno local y la comunidad es esencial para garantizar que estos proyectos no solo se completen, sino que también se mantengan y se adapten a las necesidades cambiantes de la población.
Con estas iniciativas, el alcalde Aquiles Alvarez busca no solo mejorar la salud y el acceso al agua en la Isla Puná, sino también fortalecer el tejido social y económico de la región, creando un futuro más prometedor para sus habitantes.