Las intensas lluvias que han azotado Ecuador en los últimos días han desencadenado una serie de emergencias en varias provincias, siendo Azuay una de las más afectadas. En particular, la parroquia Amaluza, ubicada en el cantón Sevilla de Oro, ha sido escenario de un devastador aluvión que ha dejado a su paso destrucción y caos. Este fenómeno natural, que ocurrió el 2 de julio de 2025, ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de la región ante las inclemencias del tiempo y ha generado una respuesta inmediata de las autoridades locales y nacionales.
La mañana del miércoles, un aluvión arrastró lodo, piedras y agua hacia el centro de Amaluza, afectando no solo la infraestructura vial, sino también negocios y viviendas. Según informes, el desbordamiento del río Curiacu fue el principal responsable de este desastre, que se produjo en un momento en que muchas personas se encontraban en un restaurante local, disfrutando de su desayuno. La situación se tornó caótica cuando un estruendo repentino interrumpió la tranquilidad, y el lodo comenzó a ingresar al establecimiento, arrastrando vehículos estacionados en las cercanías.
Las autoridades del Sistema Integrado de Seguridad ECU 911 recibieron la alerta y se activaron de inmediato. En las primeras horas de la emergencia, los residentes de Amaluza se unieron para intentar limpiar el lodo que cubría las calles y las propiedades, mientras que el agua continuaba fluyendo por las quebradas cercanas. La respuesta del Municipio de Sevilla de Oro fue rápida, convocando al Comité de Operaciones de Emergencia Cantonal (COE) para evaluar la situación y coordinar acciones de rescate y limpieza.
### Impacto en la Infraestructura y la Comunidad
El impacto del aluvión en Amaluza ha sido significativo. Se reportaron daños en aproximadamente 1,000 metros de vías, así como en varios bienes privados, incluyendo dos restaurantes y al menos cuatro vehículos. La situación ha llevado a la evacuación de los residentes de las áreas más afectadas, y se han desplegado máquinas retroexcavadoras para ayudar en la remoción del lodo acumulado.
Diego Matovelle, coordinador zonal de Gobierno, informó que a las 15:00 se llevaría a cabo una reunión del COE cantonal para analizar la situación y planificar las acciones necesarias para mitigar los efectos del aluvión. Además, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos ha estado coordinando esfuerzos para habilitar la vía Guarumales – Méndez, que ha sido severamente afectada por el deslizamiento de tierra.
El aluvión en Amaluza no es un caso aislado. En otras partes de Azuay, como en Gualaceo, se han reportado desbordamientos de ríos, lo que ha llevado a la inundación de áreas recreativas y a la necesidad de patrullajes por parte de las autoridades locales. En Cuenca, el incremento de caudales en los ríos Yanuncay y Tarqui ha puesto a la ciudad en estado de prealerta, y se han reportado derrumbes en las vías que conectan Azuay con la Amazonía, complicando aún más la situación.
### Respuesta de las Autoridades y Prevención de Futuras Emergencias
La respuesta de las autoridades ha sido crucial en este momento de crisis. La Prefectura del Azuay y otras entidades gubernamentales han activado protocolos de emergencia para atender a los afectados y evaluar los daños. Sin embargo, la situación también ha puesto de relieve la necesidad de implementar medidas preventivas para evitar que desastres como este se repitan en el futuro.
El Instituto Nacional de Hidrología y Meteorología (Inamhi) ha advertido sobre la posibilidad de más lluvias intensas en la región, lo que podría agravar la situación actual. Las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta y a evitar acercarse a las orillas de los ríos, que están en niveles críticos debido a las precipitaciones.
Además, se están llevando a cabo esfuerzos para mejorar la infraestructura de drenaje y la gestión de riesgos en las zonas más vulnerables. La educación y concienciación de la población sobre cómo actuar ante emergencias naturales también son aspectos clave para reducir el impacto de futuros desastres.
La situación en Azuay es un recordatorio de la importancia de estar preparados ante los fenómenos naturales y de la necesidad de una respuesta coordinada entre las autoridades y la comunidad para enfrentar estos desafíos.