La Corporación Eléctrica de Ecuador (Celec) se enfrenta a una crisis financiera que amenaza su capacidad para generar y mantener la electricidad en el país. Con una responsabilidad del 90% de la generación eléctrica nacional, Celec se encuentra en una encrucijada, donde las deudas y la falta de inversión han llevado a una situación crítica. En este contexto, el nuevo gobierno de Daniel Noboa ha prometido sanear la empresa y transformarla en una entidad más eficiente y transparente.
### La Situación Actual de Celec
Celec, que administra 83 centrales de generación y ha alquilado tres barcazas turcas, ha visto cómo su operación se ha visto afectada por problemas financieros y de corrupción. En 2024, Ecuador experimentó su crisis eléctrica más severa en 15 años, con cortes de luz que generaron pérdidas estimadas en USD 1.916 millones, según el Banco Central de Ecuador. Esta crisis se debió a la falta de generación eléctrica, exacerbada por la insuficiencia de inversiones en mantenimiento y nuevas instalaciones.
Desde octubre de 2024, Gustavo Sánchez ha asumido la gerencia general de Celec, en un intento por revertir la situación. Sin embargo, la empresa enfrenta varios desafíos que complican su recuperación. Uno de los principales problemas es la falta de transparencia en sus estados financieros. Aunque Celec ha publicado informes auditados desde 2015 hasta 2022, la auditoría de 2023 aún está en proceso y se espera que se complete en julio de 2025.
El presupuesto de Celec para 2025 es de USD 1.845 millones, de los cuales solo USD 293 millones están destinados a gastos de inversión. Hasta abril de 2025, solo se habían ejecutado USD 13 millones en inversiones, lo que plantea serias dudas sobre la capacidad de la empresa para modernizar su infraestructura y responder a la creciente demanda de electricidad.
### Problemas Estructurales y Financieros
Uno de los problemas más críticos que enfrenta Celec es la estructura tarifaria que rige la generación eléctrica en Ecuador. Las tarifas que se cobran actualmente solo cubren los costos de operación y mantenimiento, sin contemplar las inversiones necesarias para el desarrollo de nuevos proyectos. Esto ha llevado a una situación en la que las termoeléctricas, muchas de las cuales tienen entre 30 y 53 años de antigüedad, no pueden satisfacer la demanda durante períodos de sequía, como el que se vivió en 2024.
El costo promedio de la electricidad en Ecuador es de 3,4 centavos por kilovatio hora (kWh), mientras que la tarifa total, que incluye comercialización y distribución, es de 10 centavos. Sin embargo, según la Cámara de Energía de Ecuador, la tarifa debería ser de al menos 14 centavos para cubrir las inversiones necesarias en generación. Esta discrepancia ha llevado a una acumulación de deudas, tanto de empresas distribuidoras como de CNEL, que adeuda a Celec USD 469 millones.
Además, Celec ha otorgado préstamos temporales al Ministerio de Finanzas, lo que ha debilitado aún más su posición financiera. En 2023, las transferencias al Ministerio sumaron USD 188 millones, y parte de esos recursos no han sido devueltos, lo que limita la capacidad de Celec para realizar inversiones cruciales.
La situación se complica aún más por los problemas legales que enfrenta la empresa. Celec está envuelta en múltiples procesos judiciales relacionados con obras contratadas durante el gobierno anterior, que suman demandas por USD 290,79 millones. Estos problemas legales no solo afectan la imagen de la empresa, sino que también desvían recursos que podrían ser utilizados para mejorar la infraestructura eléctrica.
### La Promesa de Transformación del Gobierno
El presidente Daniel Noboa ha prometido transformar Celec y otras empresas públicas, enfocándose en la transparencia y la eficiencia. En su discurso de posesión, Noboa afirmó que terminaría con la corrupción y que los ingresos generados serían utilizados para el desarrollo del país. Sin embargo, para que estas promesas se materialicen, es fundamental que se implementen cambios estructurales en la gestión de Celec.
La falta de inversión en infraestructura y el problema de las tarifas son cuestiones que deben ser abordadas de inmediato. La empresa necesita un plan de acción claro que contemple no solo la modernización de sus instalaciones, sino también una revisión de su estructura tarifaria para garantizar su sostenibilidad a largo plazo.
Además, la transparencia en la gestión financiera es crucial para recuperar la confianza de los ciudadanos y de los inversionistas. La auditoría de los estados financieros debe ser una prioridad, y los resultados deben ser comunicados de manera clara y accesible al público.
La situación de Celec es un reflejo de los desafíos más amplios que enfrenta el sector eléctrico en Ecuador. Con la creciente demanda de electricidad y la necesidad de una transición energética, es imperativo que el gobierno y la empresa trabajen juntos para garantizar un suministro eléctrico confiable y sostenible para el futuro del país.