La reciente decisión de un tribunal de arbitraje internacional de desestimar la demanda presentada por el consorcio Aerovía contra el municipio de Guayaquil ha generado un impacto significativo en el ámbito del transporte público de la ciudad. Este fallo, emitido el 21 de octubre de 2025, se produce en un contexto donde la Aerovía, un sistema de transporte que conecta Guayaquil con Durán, ha enfrentado serias dificultades económicas desde su inauguración en diciembre de 2020.
El consorcio, compuesto por Poma S.A.S. de Francia y Sofratesa Inc. de Panamá, había demandado al municipio alegando incumplimientos contractuales que, según ellos, habían llevado a pérdidas económicas considerables. En su demanda, solicitaban una indemnización de 20 millones de dólares, cifra que representaba el 15% de la inversión realizada en la operación del sistema. Sin embargo, el tribunal determinó que las alegaciones del consorcio carecían de fundamento y que, de acuerdo con el contrato firmado en 2016, el consorcio asumía todos los riesgos asociados con la operación de la Aerovía.
### Contexto de la Aerovía de Guayaquil
La Aerovía fue concebida como una solución innovadora para el transporte urbano, diseñada para movilizar hasta 35,000 pasajeros diariamente a través de 154 cabinas. Sin embargo, desde su inauguración, el sistema ha enfrentado una baja demanda, transportando un promedio diario de menos de 7,000 usuarios. En febrero de 2025, por ejemplo, la cifra se situó en 6,518, lo que representa solo el 18% de la capacidad proyectada.
Uno de los factores que ha contribuido a esta baja demanda es la inseguridad en la ciudad, que ha disuadido a muchos potenciales usuarios de optar por este medio de transporte. Además, la Aerovía comenzó a operar en un momento crítico, coincidiendo con el inicio de la pandemia, lo que impactó negativamente en su capacidad de atraer pasajeros desde el principio. La falta de promoción adecuada por parte del municipio y la competencia de otros sistemas de transporte, como las taxirrutas que cubren la misma ruta, también han sido señaladas como razones de la baja utilización del servicio.
### Implicaciones del Laudo Arbitral
El laudo arbitral no solo desestimó las demandas del consorcio, sino que también impuso costos significativos a Poma S.A.S. y Sofratesa Inc. El tribunal ordenó que el consorcio cubriera los costos del arbitraje, que ascendieron a 294,500 dólares, además de reembolsar 805,025 dólares y 9,593 euros al municipio y a la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) por gastos legales y otros costos relacionados con el arbitraje. Esta decisión representa un alivio financiero para el municipio, que ha estado lidiando con las consecuencias de la baja demanda y las pérdidas económicas del sistema de transporte.
La resolución del tribunal se considera un triunfo para la administración municipal, que ha estado bajo presión para garantizar la viabilidad del sistema de transporte. Andrés Roche, exfuncionario municipal y gerente de la Autoridad de Tránsito hasta 2020, expresó su satisfacción con el fallo, señalando que se impuso la técnica y la razón en beneficio de la ciudadanía. Este tipo de decisiones son cruciales en un contexto donde la confianza en los sistemas de transporte público es esencial para su sostenibilidad a largo plazo.
El futuro de la Aerovía de Guayaquil dependerá en gran medida de la capacidad del municipio para implementar estrategias efectivas que fomenten su uso. Esto podría incluir campañas de promoción, mejoras en la seguridad y la integración del sistema con otras modalidades de transporte público. La administración municipal deberá trabajar en estrecha colaboración con los ciudadanos y otros actores involucrados para revitalizar el interés en la Aerovía y asegurar su éxito en el futuro.
La desestimación de la demanda del consorcio Aerovía no solo representa un hito legal, sino que también plantea un desafío para el municipio de Guayaquil en su búsqueda por mejorar el transporte público y satisfacer las necesidades de sus ciudadanos. La Aerovía tiene el potencial de convertirse en una pieza clave en la movilidad urbana de la ciudad, pero su éxito dependerá de la capacidad de la administración para adaptarse a las realidades del entorno y responder a las expectativas de los usuarios.