La industria alimentaria está en constante transformación, y un claro ejemplo de esta evolución es Natuchips, un snack ecuatoriano que ha decidido dar un paso hacia la sostenibilidad sin perder su esencia. Esta marca, conocida anteriormente como Platanitos, ha renovado su imagen y su enfoque, integrando prácticas más responsables con el medio ambiente y el desarrollo local. En este artículo, exploraremos cómo Natuchips está redefiniendo su identidad y su compromiso con el agro ecuatoriano, así como su impacto en la comunidad.
### Un Cambio de Imagen con Propósito
La nueva etapa de Natuchips no se limita a un simple cambio estético; es una estrategia que busca comunicar de manera más efectiva su esencia como producto 100% ecuatoriano. Gabriela Sarmiento, gerente de Marketing de PepsiCo Alimentos Ecuador, ha destacado que esta transformación responde a una evolución natural dentro del catálogo de la empresa, alineándose con valores de origen, naturalidad y cercanía. La imagen renovada de Natuchips busca reflejar el orgullo de un producto que proviene del campo ecuatoriano, donde el plátano verde, su ingrediente principal, es un símbolo de la gastronomía local.
El plátano verde no solo es un componente esencial en platos típicos como el encebollado o el ceviche, sino que también representa una fuente de empleo y sustento para muchas familias agricultoras. PepsiCo ha establecido relaciones comerciales sostenibles con estas comunidades, asegurando que el impacto positivo de su producción se sienta en el campo. Este enfoque no solo beneficia a los agricultores, sino que también fortalece el vínculo entre la marca y sus consumidores, quienes valoran cada vez más la procedencia de los productos que consumen.
### Empoderamiento y Compromiso Social
Uno de los aspectos más destacados de la nueva identidad de Natuchips es su enfoque en las personas que hacen posible la producción del snack. La marca ha decidido poner en el centro a las mujeres que desempeñan roles clave en la cadena de valor, muchas de ellas jefas de hogar que participan en el pelado manual del plátano. Este proceso es fundamental para garantizar la calidad del producto final, y Natuchips busca reconocer y empoderar a estas trabajadoras.
Gabriela Sarmiento ha mencionado que la empresa planea introducir una iniciativa social en Ecuador, similar a las que ya existen en otros países de la región, que apoyará directamente a las peladoras de plátano. Este tipo de programas no solo contribuyen al bienestar de las trabajadoras, sino que también fomentan un sentido de comunidad y solidaridad en el sector agrícola.
Además del empoderamiento de las mujeres, Natuchips ha implementado prácticas ambientales responsables en cada etapa de su producción. En su planta, cerca de 1,000 paneles solares generan el 24% de la energía utilizada, mientras que el agua es tratada y reutilizada. También han comenzado a distribuir parte de su producto mediante camiones eléctricos, lo que reduce su huella de carbono y demuestra un compromiso real con la sostenibilidad.
### Innovación en el Portafolio de Productos
La renovación de Natuchips también se refleja en su portafolio de productos. A las tradicionales versiones con sal y limón se ha sumado una nueva variante, Ají Casero, que combina la naturalidad del plátano con un toque picante, respondiendo a las demandas de los consumidores que buscan sabores más atrevidos. Esta innovación es un claro ejemplo de cómo la marca escucha a su audiencia y se adapta a sus preferencias.
La versión clásica con sal ha sido modificada para presentar hojuelas planas, una decisión basada en estudios de mercado que buscaban ofrecer una opción más versátil para acompañar comidas o salsas. De esta manera, Natuchips no solo mantiene su sabor distintivo, sino que también se posiciona como una marca ecuatoriana con un rostro humano, un fuerte arraigo rural y un compromiso con el desarrollo sostenible.
El enfoque de Natuchips hacia la sostenibilidad y la innovación no solo beneficia a la empresa, sino que también tiene un impacto positivo en la economía local y en la comunidad. Al fomentar prácticas agrícolas sostenibles y alinear su producción con las preferencias de los consumidores, Natuchips se convierte en un ejemplo de cómo las decisiones empresariales pueden generar un cambio significativo en la sociedad.
Detrás de cada bocado de Natuchips hay una historia de compromiso, esfuerzo y un futuro prometedor. La marca no solo ofrece un snack delicioso, sino que también invita a los consumidores a ser parte de un movimiento hacia un consumo más consciente y responsable, donde cada elección cuenta y cada producto tiene una historia que contar.