La emblemática ruta ferroviaria Nariz del Diablo, que conecta Alausí y Sibambe, ha reanudado sus operaciones tras un prolongado periodo de inactividad. Este icónico trayecto, conocido por su impresionante recorrido a través de los Andes, no solo representa un atractivo turístico, sino que también simboliza la reactivación económica de la región. Desde su inauguración en 1908, esta vía ha sido un testimonio de la ingeniería latinoamericana, y su reapertura promete revitalizar el turismo y las comunidades locales.
### Un Viaje Histórico y Cultural
La ruta Nariz del Diablo es famosa por su trazado en zigzag que desciende por una pendiente escarpada a más de 2.600 metros de altitud. Este recorrido de apenas 12 kilómetros ha fascinado a viajeros de todo el mundo, quienes han podido disfrutar de la belleza natural de los Andes mientras experimentan la adrenalina de este viaje único. La reactivación del tren, que se llevó a cabo en julio de 2025, marca un hito importante para el turismo en Ecuador, especialmente después de cinco años de inactividad de Ferrocarriles del Ecuador.
Los visitantes ahora pueden disfrutar de un viaje que no solo les ofrece vistas espectaculares, sino también una inmersión en la cultura local. Durante el trayecto, se organizan presentaciones culturales y se ofrece gastronomía típica de la región, lo que permite a los turistas conectar con las tradiciones de las comunidades que habitan a lo largo de la ruta. Este enfoque cultural es parte de una estrategia más amplia para promover un turismo sostenible y responsable, evitando el impacto negativo del turismo masivo.
### Impacto Económico y Sostenibilidad
La reapertura del tren Nariz del Diablo no solo es una victoria para el turismo, sino que también se espera que tenga un impacto significativo en la economía local. Según estimaciones del Ministerio de Turismo, se prevé que más de 10.000 turistas recorran esta ruta en los primeros tres meses de funcionamiento. Esta afluencia podría resultar en un aumento del 60% en la actividad comercial de Alausí, beneficiando a hoteles, restaurantes, guías turísticos y artesanos locales.
Para garantizar que el turismo se desarrolle de manera sostenible, se han implementado varias medidas. El control de la capacidad de visitantes por día es una de las estrategias clave, junto con actividades educativas y programas de sensibilización cultural. Estas iniciativas buscan no solo proteger el patrimonio cultural y natural de la región, sino también asegurar que las comunidades locales se beneficien directamente del turismo.
La reactivación de la ruta Nariz del Diablo es solo el comienzo de un plan más amplio para revitalizar otras rutas patrimoniales en Ecuador. Se están considerando trayectos como Riobamba–Urbina e Ibarra–Salinas, lo que podría abrir nuevas oportunidades para el turismo en el país.
### Detalles Prácticos para los Visitantes
Los recorridos en el tren Nariz del Diablo se realizan de miércoles a domingo, así como en días festivos. Las salidas desde la estación de Alausí están programadas a las 08:00, 11:00 y 14:00, con un ‘check-in’ que debe realizarse 30 minutos antes del abordaje. Los boletos están disponibles a través de la plataforma Ticket Éxito, donde los usuarios pueden seleccionar la fecha, hora y asientos deseados. Las tarifas son accesibles, con precios diferenciados para nacionales y extranjeros, lo que facilita el acceso a una amplia gama de visitantes.
El trayecto, que dura aproximadamente dos horas, incluye una parada en el mirador de la Nariz del Diablo y una visita a la estación de Sibambe. Allí, las comunidades de Tolte, Nizag y Sibambe reciben a los turistas con danzas tradicionales, artesanías y una muestra de su gastronomía local. Además, se ofrece un tiempo libre para que los visitantes exploren las cafeterías y otros atractivos de la zona, enriqueciendo aún más su experiencia.
La reapertura de la ruta ferroviaria Nariz del Diablo no solo representa un regreso a la historia y la cultura de Ecuador, sino que también es un paso hacia un futuro más sostenible y próspero para las comunidades locales. Este viaje a través de los Andes es una invitación a descubrir la riqueza cultural y natural de una de las regiones más impresionantes del país.